Triunfó con un poco más de un 87 por ciento en unas primarias del Partido de la Liberación Dominicana que le faltó glamour, término que utilizo para no restarle fuerzas ni simpatías políticas al trío de contrincantes que le enfrentó en esta contienda del pasado domingo 26 de junio.
Era de esperarse su triunfo por encima de los demás que se tiraron al ruedo en busca de la candidatura por primera vez, aunque Francisco Domínguez Brito, José Tomás Pérez y Radhamés Segura han dado muestras de sobra de que tienen madera de ser buenos políticos y de ser considerados reservas de su partido para próximas contiendas electorales.
Danilo es el candidato del Partido de la Liberación Dominicana a enfrentarse por segunda ocasión a Hipólito Mejía Domínguez, del Partido Revolucionario Dominicano, el 20 de mayo del próximo año.
Ya se vieron la cara en las primeras elecciones presidenciales de este Siglo XXI. El ganador todos aquí en la República Dominicana y en una parte del mundo sabe que fue Hipólito Mejía. Pero en esta segunda década de este nuevo siglo ¿se repetirá la historia?
No son las mismas condiciones, lo sabemos, en cuanto se refiere que el país ha cambiado sobremanera, las instituciones han sido modernizadas, saneadas, el PLD es ahora una organización de masas, una generación que ha crecido y se ha desarrollado bajo las modernas tecnologías, con más y mejores oportunidades. La República Dominicana está globalizada y aunque sin presumir “somos una economía emergente”.
Qué pasará el 20 de mayo del 2012 con Danilo?..sólo Dios..lo sabe, pero podemos echar un vistazo para quitarle un poco de labor al Todopoderoso sobre estas decisiones de los hombres.
Aunque haya obtenido el triunfo a lo interno del PLD, no debe mostrarse como el triunfador de la elecciones del 2012. Aunque ganó con casi un 90 por ciento a sus demás compañeros de partido eso no significa que ya es un boleto para la presidencia de la República.
De los mayores siempre oí que cada quien cava su propia tumba, en buen decir, cada quien se forja su destino. En busca de salir airoso y obtener la presidencia de la República Danilo Medina deberá cambiar su discurso. Y no sólo el discurso, deberá transformarse y transformar a los simpatizantes y seguidores del PLD que aún lucen con los brazos caídos al ver que el líder y presidente del partido oficialista y de la República Dominicana, el doctor Leonel Fernández Reyna no se presentará en la presente contienda.
Danilo deberá cambiar la percepción de que sin Leonel el PLD puede ser gobierno, y ¡buen gobierno!, deberá ser consecuente consigo mismo.
Deberá enfrentarse ahora a las bases de su partido que aún tiene la creencia de que no es ganador y hacerles ver que lo ocurrido en el 2000 fue un asunto de circunstancias sobre las cuales 12 años después no hay condiciones para que se repita. Deberá ahora enfrentar solo, aunque haya concitado el apoyo del mandatario y algunos de sus funcionarios y casi por completo el Poder Legislativo, a lo que él mismo ha propuesto en la campaña interna: “SEGUIR LO QUE ESTA BIEN, CORREGIR LO QUE ESTA MAL, Y HACER COSAS QUE NO SE HAN HECHO, PARA IMPULSAR UN GOBIERNO PARA TODOS”.
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